Llega fin de año y junto con ello las fiestas. Junto con las fiestas, las juntadas sociales. Y consecuentemente, aumentan las ingestas calóricas o más abundantes, y el consumo de bebidas alcohólicas y gaseosas.
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Llega fin de año y junto con ello las fiestas. Junto con las fiestas, las juntadas sociales. Y consecuentemente, aumentan las ingestas calóricas o más abundantes, y el consumo de bebidas alcohólicas y gaseosas.
Suele ser una semana en el año en la cual se suele comer más volumen de alimentos y muchas veces genera sensación de pesadez o malestar, con consecuente “necesidad” de compensar las “comilonas”. Ahora bien, ¿Cómo encaramos el POST fiestas? ¿Deberíamos hacer algún detox para compensar o con volver a la alimentación habitual basta?
¿QUÉ DEBO HACER POSTERIOR A LAS FIESTAS?
Hay una gran conocida frase que dice “es más importante lo que hacemos entre Año nuevo y navidad que entre navidad y año nuevo”. Es decir, que lo que más va a valer es lo que hacemos durante el año y no solamente en algunas fechas aisladas. Ya que dos días frente a los 365 días del año no nos van a hacer diferencia ni en composición corporal ni en rendimiento deportivo.
Ahora bien, si puede generarnos sensación de inflamación o malestar gastrointestinal por falta de costumbre. Pero eso NO significa que tenga que comer menos o distinto los días siguientes a las fiestas.
Es de vital importancia entender estos factores, y que todo lo que pueda aumentar en balanza no tiene que ver con la grasa corporal sino más bien con inflamación y contenido a nivel gastrointestinal. Entonces, el consejo principal es generar un equilibrio: disfrutar de las fiestas, relajarnos con nuestros seres queridos, concientizando la alimentación para no generar malestar, y volviendo a una alimentación saludable los días posteriores sin necesidad de compensar las ingestas.