MASA MUSCULAR Y ESTRUCTURA ÓSEA
El desarrollo de la masa muscular tiene una relación directa con nuestro esqueleto. Es decir, que el potencial aumento de masa muscular se vincula con la capacidad de sostén de nuestro esqueleto.
A mayor peso del esqueleto, mayor será el potencial desarrollo de masa muscular ya que nuestra base nos permitiría sostener más peso. Ahora bien, dependiendo del tipo de actividad y objetivos, esta condición puede jugarnos a favor o en contra: no es lo mismo un deporte de contacto como el Rugby donde se buscan altos niveles de masa muscular y cuanto mayor sea la estructura ósea, mejor, que un deporte de resistencia como maratón o triatlón, donde se busca una base muscular adecuada para ganar fuerza y potencia pero a la vez estar livianos: aquí una estructura ósea menor jugará a favor.
ÍNDICE MÚSCULO ÓSEO
Para poder entender de esta relación músculo esquelética, deberíamos considerar hacer un estudio de composición corporal como la antropometría de 5 componentes con protocolo ISAK (nivel 2) donde obtenemos dentro de los mismos tanto el peso del esqueleto como el de nuestra masa muscular. Es a partir de allí donde, en base al peso del esqueleto, podemos hacer proyección individual del potencial desarrollo de masa muscular y qué relación deberíamos obtener para determinada disciplina o deporte.
REFERENCIAS Y CONCLUSIONES
Los objetivos de hipertrofia o masa muscular deberían proyectarse en primera instancia en el peso de nuestro esqueleto, para poder determinar qué volumen de masa muscular podríamos aumentar de manera natural.
Nuestro esqueleto tiene un “tope” de sostén, el cual, no podemos aumentar indefinidamente. Es por ello que, hay que tener sumo cuidado con el uso de ciclo de esteroides u hormonas que aumentan nuestra masa muscular de manera sobrenatural, ya que podemos pasarnos de ese “tope” y, dentro de los riesgos, más allá de ser hepatotóxicas, podrían traer daño a nivel muscular y óseo, ya que nuestra estructura no estaría potencialmente preparada para tanto peso.