Una de las preocupaciones mas grandes que ocupan en la población general de la actualidad se relaciona con el perfil lipídico (ácidos grasos en sangre) y su relación con nuestro sistema cardiovascular.
La salud preventiva es fundamental para que nuestro sistema de salud no se sature, y se puede gestionar de manera simple, fácil, económica y rápida como lo es mantener un estilo de vida saludable, a través de hábitos alimentarios, actividad física y movimiento y un buen descanso, entre otras.
ACTIVIDAD FÍSICA Y SALUD CARDIOVASCULAR
La actividad física puede traernos múltiples beneficios. Dentro de ellos, uno de los mas importantes es que contribuye a mejorar nuestro perfil lipídico, disminuyendo la generación de colesterol LDL o mas bien conocido como “colesterol malo” y aumentando la generación de colesterol HDL o mas bien conocido como “colesterol bueno”.
A su vez, al tener un perfil lipídico adecuado, nuestro organismo se vuelve más funcional y logramos disminuir la tendencia a generación de inflamación sistémica.
No nos olvidemos que el perfil lipídico mejora también con el resto de los hábitos mencionados anteriormente: en conjunto, combatiremos cualquier riesgo de salud cardiovascular y nos alejamos de la enfermedad causada por el ambiente.
CONCLUSIONES
Llevar un estilo de vida saludable es de vital importancia. No subestimemos los buenos hábitos ya que ellos son quienes nos alargaran la calidad de vida.
