Este juego combina aprendizaje y diversión para enseñar a los niños hábitos saludables de forma visual y práctica. Al asociar imágenes con conceptos saludables, los niños desarrollan su memoria visual y refuerzan conocimientos sobre una vida saludable y balanceada. Además fomenta habilidades sociales como el respeto en turnos, la atención y la paciencia. Se puede jugar individualmente y en grupo.
El juego consta de 40 cartas, 20 parejas, un instructivo y la caja de empaque.